La agrupación universitaria radical, donde el gobernador militó en su juventud y ocupó cargos importantes, lo criticó duramente por suspender el pago de la cláusula gatillo a los maestros.
En un duro pronunciamiento, Franja Morada, la histórica agrupación estudiantil de la Unión Cívica Radical (UCR), salió a repudiar la decisión del gobernador Leandro Zdero de no abonar en agosto la cláusula gatillo a los docentes chaqueños.
Lo llamativo es que se trata de una crítica interna, ya que Zdero no solo pertenece al mismo partido, sino que en los 90 fue un destacado militante de la agrupación universitaria.
En un comunicado titulado “¡Sr. Gobernador, el ajuste no es con la educación!”, Franja Morada calificó la medida como un “ataque brutal” contra los docentes y la educación pública. “No se puede hablar de calidad educativa sin inversión. La cláusula gatillo es una herramienta fundamental para que los salarios no sean devorados por la inflación”, señalaron.
El gobierno chaqueño, a través del ministro de Economía, Alejandro Abraam, justificó la decisión por la “mega deuda heredada” de gestiones anteriores, priorizando gastos en salud. Sin embargo, el contraste con el discurso de Zdero en 2024 es abismal: hace un año, el mandatario celebraba el pago de la cláusula como un “compromiso con la educación”.
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Ironía política
Zdero, arquitecto egresado de la UNNE, fue presidente del Centro de Estudiantes de Arquitectura por Franja Morada en los 90 y luego escaló en la política radical. Hoy, su propia cantera lo señala: “El radicalismo tiene una historia de lucha por la educación pública. No venimos a invocar un legado, venimos a asumirlo”, remarcó la agrupación.
Con el reinicio de clases en riesgo y los gremios en pie de guerra, la ruptura de Franja Morada con Zdero marca un nuevo frente de conflicto para el gobernador, que acumula desgaste por una crisis económica que ya golpea a los docentes: un maestro que gana 900 mil pesos mensuales perderá unos 50 mil pesos por este recorte.
Mientras el oficialismo insiste en la “herencia recibida”, la educación chaqueña se convierte en el campo de batalla de una pulseada que, incluso, divide al radicalismo.
eschaco